❄ Las puertas del gimnasio finalmente se abren, con Glaceon dando el primer paso hacia el interior. Sin embargo, te arroja una mirada de curiosidad. Probablemente esperaba que no fueras una persona tan callada. En cualquier caso, no pone ninguna pega al respecto. Nada más entres al hall de entrada, podrás ver unas escaleras que ascienden, con el símbolo del gimnasio en lo alto. En la planta baja podrás localizar tres puertas distintas frente a ti. Son tres pruebas que debes superar antes de ascender por las escaleras, reuniendo cada uno de los símbolos que necesitarás en la parte superior. Para acceder a cada una, pues no es necesario realizarlas en ningún orden, tan sólo deberás decir el nombre de la prueba en voz alta. Las opciones son: Intuición, Confianza y Empeño. Cada vez que una prueba sea superada, deberás volver aquí, hasta completar las tres y poder retornar al gimnasio de nuevo, tal y como viene escrito en un pequeño mensaje en una de las paredes heladas. Este también será un lugar de descanso para ti y tus pokémon. Tómate todo el tiempo que creas necesario descansando y meditando aquí. Mientras el tiempo transcurra, Glaceon descansará en un rincón, todavía observándote.

❄ Llegarás a este lugar en varias ocasiones, así que no dudes en disfrutar del gélido descanso que ofrece esta zona. Serán necesarias un total de 8 líneas para superar esta fase. Cada vez que llegues aquí podrás curar a tus pokémon. Ascender hasta la habitación de la líder no será posible hasta que poseas los tres símbolos del gimnasio, habiendo uno tras cada puerta diferente. Puedes poner un recordatorio cada vez, acerca de los que llevas actualmente. Adicionalmente, generar cualquier duda en voz alta hará que Glaceon te guíe hacia la respuesta. Tus elecciones también deberán ser enunciadas en voz alta. En este momento dispones de los siguientes símbolos: Ninguno.

❄ Acabas de entrar en un santuario helado, con un pequeño templo al frente, y rodeado de inmensos pilares forjados en denso hielo. El templo no tiene más que un largo espejo, donde tu reflejo presenta una gelidez apropiada del ambiente. Hay una pequeña inscripción ilegible en el centro, y una Froslass flotando alrededor del lugar, pasando el tiempo, y sin percatarse de tu presencia en lo absoluto. Tan pronto como entras, la pesada puerta de hielo se ha cerrado tras de ti. No parece que puedas volver a salir hasta que superes o fracases en la prueba que se predispone frente a ti. Tras unos minutos (que se hacen largos debido al silencio), Froslass desciende de su lugar de pasatiempo, colocándose tras de ti frente al espejo. Su superficie tan sólo te muestra a ti, a Froslass, y a Glaceon, que se encuentra en el fondo de la habitación, recostado. Tus pokémon no se reflejan en este hechizo cristalino. Tan sólo tú, en plena soledad con el frío. De repente, Froslass se apega al espejo y la inscripción cambia. Las letras dibujadas sobre el espejo ahora pueden leerse con claridad. Debes contestar a las preguntas que se te hagan, con plena sinceridad. Piensa bien tus palabras, entrenador. Y recuerda que Glaceon sigue vigilándote, incluso si has pasado la prueba. Durante el transcurso de esta prueba, varias preguntas se irán realizando, y deberás contestarlas en voz alta frente a tus jueces, Glaceon y Froslass.

❄ Afina bien tus sentidos a la hora de responder, entrenador. Glaceon es un guía exquisito. Si no haces una respuesta adecuada, podría llegar a percibirlo, y sentirás el peso de la penalización. De la misma forma, tus pokémon siempre aprenden cosas de ti. Son criaturas curiosas, y se basan en tu ejemplo. Tan solo piensa bien tus palabras, y todo irá bien. La medalla solo será entregada a aquellos con intenciones sinceras. 12 líneas serán necesarias en cada uno de tus intentos de resolución de la prueba. Cada uno de tus posts será contestado por la líder de gimnasio, a medida que la prueba de Intuición progrese, hasta su finalización.

❄ ¿Qué significa combatir para ti, y por qué has elegido este lugar para proseguir tu camino?

❄ Tan pronto como la pregunta es respondida, las letras se vuelven borrosas, y con un movimiento leve de Froslass, éstas cambian de posición, generando nuevos símbolos, nuevas frases. Cada vez queda más claro que Froslass es la responsable de todo esto. Sin embargo, sus movimientos y pensamientos siguen siendo bastante difíciles de predecir y perseguir. Esta vez el pokémon se posa encima del templo, observando al entrenador con fríos ojos, al mismo tiempo que agita su mano delicadamente. Tras unos segundos, permite de nuevo que puedas acercarte y leer la nueva pregunta que se ha formado.

"Entonces tus metas son las que te mueven. Lo que crea tu camino, lo que genera tu destino. ¡Qué bello arte! Pero tu respuesta fue un poco vaga. No has respondido adecuadamente. Si es cierto que el vínculo con tus pokémon es latente, ¿por qué visitar un lugar únicamente para ir a un gimnasio? ¿No es acaso lo mismo que decir... que lo que buscas son esas medallas para lucirlas? ¿Qué piensa tu pokémon? ¿Y qué hay del resto, los que llevas ocultos? ¿Acaso has pensado en la opinión de cada uno de ellos? Contesta."

Froslass es un pokémon caprichoso, y parece reflejar poca paciencia, pero es un juez justo al mismo tiempo. Se queda esperando en el lugar, jugueteando con su mano sobre la superficie del santuario. Casi parecería que sigue jugando. Pero tiene un motivo.

❄ Froslass te observa con cierto aburrimiento, pues no es un juez como otro cualquiera. A medida que el tiempo avanza, parece comenzar a cansarse, cada vez de forma más notoria, tanto que termina por mirar alrededor, ignorando al entrenador por unos segundos. Sin embargo, y a pesar de su arrogante forma de ser, responde de igual modo con la continuación de la prueba. Como si fuera un acto en mitad de todo su plan, Froslass arroja un gélido movimiento hacia el espejo, haciendo que el espejo quede inutilizado para ser leído. Las normas cambian.

- Ya me he cansado de esta pantomima. Por supuesto que sé hablar, y no hace falta tanto misterio. ¡Aún no hemos acabado! Dices que tus pokémon y tú sois como una familia. ¿No? ¿Cuántos sois? ¿Cuáles son sus necesidades mínimas? ¿Te encargas personalmente? ¡Ah, por cierto! Esta pregunta va para tu compañero, el de mirada fría. ¿Estás contento, o sólo pretendes?

Froslass observa atentamente, además de dejar salir una risa traviesa. Por supuesto, podía hablar desde el principio. Comienza a pasárselo bien, sin duda. Con un gesto, hace quebrar el espejo en numerosos pedacitos detrás de sí, haciendo una dramática reverencia hacia el frente, hacia un público inexistente más allá del solitario entrenador.

- Yo sólo creo que las medallas de gimnasio no son más que un acto. Algo impuro. ¡Eso no es arte! Incluso si es un momento teatral, dime... ¿Abandonarás a tus compañeros cuando consigas tus metas? ¡No me respondas así sin más! ¡Si no eres sincero lo sabré! ¿Por qué no me convences? ¿Eres digno de obtener el símbolo de esta prueba, o debo mandarte a casa a que tu "familia" te reconforte?

Su personalidad cambia bruscamente, aunque lo más probable es que fuera así desde el principio. No habla con verdadera crueldad, pero puedes notar que el juicio de Froslass ha subido de nivel. Lo planeó todo. El brusco cambio, con tal de sorprender al retador. A pesar de todo, sigue siendo justa. Y espera tus palabras pacientemente. Su impaciencia no es sino falsa.

❄ El pokémon de hielo alza la cabeza, y se detiene a mirar el techo durante unos instantes. Salta a la vista que está molesta. Ni siquiera actúa como un juez justo en lo absoluto, y parece que tan sólo busca molestar al visitante del gimnasio. Sin embargo, parece haber algo más que aún quiere decir, utilizando aquella dulce pero siniestra vocecilla suya.

- ¿Acaso eres millonario o algo así? Es imposible que una persona únicamente pueda alimentar tantas bocas al mismo tiempo. Y mucho menos dedicar a todos la misma atención. ¡Me niego a creerte! ¿O acaso sólo eres un soñador, cuya mente vuela lejos de la realidad? Como sea, te seré sincera. Me sacas completamente de mis casillas. Desearía atacarte y que dejaras de responder con esa seriedad tranquila tuya. ¿Tienes respuesta para todo?

Froslass hace ademán de realizar un ataque, alzando ambos brazos frente a sí. Está molesta. Es como si el retador y su forma de pensar chocaran continuamente. Tan pronto como parece adoptar una posición de ataque, y dispuesta a lanzar un peligroso movimiento, dadas las circunstancias de una habitación tan pequeña, Glaceon salta y se interpone en su camino, arrojándole una mirada venenosa al pokémon fantasma. Lo nunca visto en un reto de gimnasio.

- ¿Eso es todo cuanto quieres? No pienso tolerar esto. ¿Dices que...? ¡Entiendo, sí, entiendo! A ella no le gustará. Pero parece que está conforme. ¡Como sea! Toma tu estúpido símbolo. La prueba ha terminado. Enhorabuena, mentiroso.

Froslass se desvanece con la misma velocidad con la que apareció la primera vez, dejando ningún rastro tras de sí, a la vez que Glaceon niega con la cabeza. Vergonzosa fue la actuación del teatral pokémon. En cualquier caso, Glaceon se acerca, y trae consigo el símbolo de la Intuición. Superar las preguntas de Froslass, incluso si ésta no parecía contenta con tu forma de responder las cosas, ha terminado en una victoria para ti dentro del gimnasio. La puerta de entrada ha vuelto a abrirse. La prueba ha sido superada. Y Glaceon permanece con los ojos puestos sobre ti. Aún no es momento de elegir la siguiente prueba. Pero que el guardián del gimnasio centre tanto su atención sobre un entrenador es algo inaudito. "Prosigue, y no dudes". Esas son las letras que se ven en los restos del quebrado espejo. Aunque más parecen amenazantes que otra cosa.

❄¡Prueba superada! Vuelves a encontrarte de nuevo en el hall, justo el lugar al que llegaste primero. Estás un paso más allá en las pruebas, tómate un buen descanso, con todo el tiempo que necesites. Glaceon niega con la cabeza. No parece estar de acuerdo contigo en algunas cosas. No es Glaceon quien debe estar conforme. Sin embargo, no hace ningún llamado de atención al respecto, aunque parece que aún así, está abierta al diálogo. El lugar no ha cambiado un ápice. Nada más entras al hall de entrada, podrás ver unas escaleras que ascienden, con el símbolo del gimnasio en lo alto. En la planta baja podrás localizar tres puertas distintas frente a ti. Son tres pruebas que debes superar antes de ascender por las escaleras, reuniendo cada uno de los símbolos que necesitarás en la parte superior. Para acceder a cada una, pues no es necesario realizarlas en ningún orden, tan solo deberás decir el nombre de la prueba en voz alta. Las opciones son: Intuición, Confianza y Empeño. Cada vez que una prueba sea superada, deberás volver aquí, hasta completar las tres y poder retornar al gimnasio de nuevo, tal y como viene escrito en un pequeño mensaje en una de las paredes heladas. Este también será un lugar de descanso para ti y tus pokémon. Tómate todo el tiempo que creas necesario descansando y meditando aquí. Mientras el tiempo transcurra, Glaceon descansará en un rincón, todavía observándote. Como puedes ver, todo (hasta la mayor parte de las instrucciones) permanece igual.

❄ Llegarás a este lugar en varias ocasiones, así que no dudes en disfrutar del gélido descanso que ofrece esta zona. Serán necesarias 8 líneas mínimas para superar esta zona, cada vez que regreses a ella. Cada vez que llegues aquí podrás curar a tus pokémon. Ascender hasta la habitación de la líder no será posible hasta que poseas los tres símbolos del gimnasio, habiendo uno tras cada puerta diferente. Puedes poner un recordatorio cada vez, acerca de los que llevas actualmente. Adicionalmente, generar cualquier duda en voz alta hará que Glaceon te guíe hacia la respuesta. Tus elecciones también deberán ser enunciadas en voz alta. En este momento dispones de los siguientes símbolos: Intuición.

❄ Una imponente puerta se abre, con un sonoro y profundo eco, que podría dejar con indicios de sordera durante unos breves segundos. Tan pronto como entras en la enorme sala, de bellas paredes heladas, las cuales tan solo favorecen la aparición de un amplio eco por toda la habitación, localizas un pequeño descenso en el centro, pues la habitación casi parece una pirámide invertida en cuanto a forma. Hay unas escaleras para descender, y en el centro hay un pequeño área, probablemente la zona más fría del lugar, y que contiene un pedestal que sostiene el próximo símbolo que necesitas. Alcanzarlo parece fácil, pero probablemente te intriga que la sala no guarde ningún secreto y ofrezca su tesoro sin más. Indudablemente no te equivocas, pues una vez te acercas al orbe puedes observar como la salida, en lo alto de las escaleras queda bloqueada por un grueso muro de hielo. No busques derretirlo, o quedarás atrapado hasta que la prueba haya finalizado en fracaso. Todo ello se puede apreciar en las reacciones de Glaceon. Sería una locura. Aunque el Gimnasio de Hielo no se hace responsable de los que quieran quedar sepultados en el hielo. Piensa con cabeza. Debes convocar un pokémon, y hacer que se coloque en el centro, en la zona de abajo de la sala piramidal, y entre en contacto con la plataforma de allí, aplicando peso. Esto abrirá la salida, y habrás conseguido con esto tu preciado símbolo. Sin embargo, tu pokémon deberá quedarse custodiando la zona hasta que la prueba de gimnasio haya finalizado. No intentes colocar allí nada más. El gimnasio se defenderá ante trucos que intenten retorcer sus normas. No te preocupes, la líder jamás dejaría que nada le ocurriera a tu pokémon. Sin embargo, dado que este es el funcionamiento de la prueba, debes confiar en aquel que dejes atrás, pues no podrás contar con su ayuda en el resto del encuentro, ni siquiera en tu combate contra la líder. Glaceon te guiará de nuevo al primer cuarto. Podrás descansar y prepararte para la siguiente prueba después.

❄ Algunos pensarán que esta prueba es más fácil de lo que parece, pero no es así. Dejar a uno de tus compañeros atrás debe ser una decisión realmente dura, incluso si es algo temporal. Esto es lo que se busca que medites con esta prueba, entrenador. Nunca defraudes a tus pokémon, y déjales ver que confías en ellos plenamente. Por supuesto, ellos confiarán en ti también, si tu seguridad es la adecuada. Serán necesarias 30 líneas para finalizar esta sección.

❄ ¡Prueba superada! Vuelves a encontrarte de nuevo en el hall, justo el lugar al que llegaste primero. Estás un paso más allá en las pruebas, tómate un buen descanso, con todo el tiempo que necesites. Aunque puede que más solitario que de costumbre, pues ahora un pokémon menos se halla contigo. La puerta de la prueba de la Confianza se encuentra firmemente cerrada en este momento. El lugar no ha cambiado un ápice, por todo lo demás. Nada más entras al hall de entrada, podrás ver unas escaleras que ascienden, con el símbolo del gimnasio en lo alto. En la planta baja podrás localizar tres puertas distintas frente a ti. Son tres pruebas que debes superar antes de ascender por las escaleras, reuniendo cada uno de los símbolos que necesitarás en la parte superior. Para acceder a cada una, pues no es necesario realizarlas en ningún orden, tan solo deberás decir el nombre de la prueba en voz alta. Las opciones son: Intuición, Confianza y Empeño. Cada vez que una prueba sea superada, deberás volver aquí, hasta completar las tres y poder retornar al gimnasio de nuevo, tal y como viene escrito en un pequeño mensaje en una de las paredes heladas. Este también será un lugar de descanso para ti y tus pokémon. Tómate todo el tiempo que creas necesario descansando y meditando aquí. Sin embargo, hay algo diferente. Has regresado al hall en solitario, pues la presencia de Glaceon ha desaparecido, sin dejar rastro. Puede que haya algo que le haya llamado la atención y se haya encerrado en alguna parte a meditar. Como puedes ver, todo (hasta la mayor parte de las instrucciones) permanece igual.

❄ Llegarás a este lugar en varias ocasiones, así que no dudes en disfrutar del gélido descanso que ofrece esta zona. Cada vez que llegues aquí podrás curar a tus pokémon. Ascender hasta la habitación de la líder no será posible hasta que poseas los tres símbolos del gimnasio, habiendo uno tras cada puerta diferente. Puedes poner un recordatorio cada vez, acerca de los que llevas actualmente. Adicionalmente, generar cualquier duda en voz alta puede hacer que algún pokémon de los alrededores te conceda una respuesta. Tus elecciones también deberán ser enunciadas en voz alta. En este momento dispones de los siguientes símbolos: Intuición, Confianza.

❄ Entrar en esta gran sala hace que un escalofrío recorra tu cuerpo. El gimnasio en si ya es bastante frío, pero este lugar parece potenciar eso más todavía. Espero que tengas un gran pokémon para cubrirte de este extraño viento helado, a no ser que quieras quedarte congelado en el lugar, entrenador. Como con todas las cosas de la vida, no debes rendirte. ¿Qué es lo que tus ojos ven, exactamente? La sala a la que has entrado, no es otra que una pequeña terraza que da al exterior, con vistas al pueblo de Glacius. Claramente, el viento golpea con fuerza, así que ten cuidado. Aunque debe haber algún secreto más en el ambiente. Tienes el símbolo de esta prueba justo delante de ti. Pero tiene un gran guardián, que quiere ver tu esfuerzo, o eso es lo que parece a primera vista. No se trata de pokémon, sino de una fría estatua de hielo, simbolizando a Regice, que bloquea el paso. A sus pies se encuentra Glaceon, que había desaparecido. Como si se tratara de un combate pokémon real, debes apartar la estatua de tu camino. Tiene 70pv. Sin embargo, excepto si tu pokémon es de tipo hielo (que recibirá la mitad), recibirás una penalización de 10pv (15pv si el número de ronda es múltiplo de 3) por cada ronda al pokémon que esté combatiendo, gracias al gran frío de la sala. La estatua no tiene debilidades debido al frío de la sala. Una vez te esfuerces lo suficiente como para acabar con ella, recoge tu símbolo, entrenador. Puede que tengas la aprobación de Glaceon y puedas continuar

❄ La vida siempre ofrece retos complicados, entrenador. Pero alguien que realmente desea lo mejor para sus pokémon debe mantener la cabeza fría y saber actuar con destreza y velocidad, especialmente en situaciones límite. Aquí serás evaluado en ese tipo de situaciones, pues cada vez que la estatua se mueva, los vientos se alzarán bruscamente, golpeándote a ti y a tus pokémon sin un ápice de remordimiento. Sigue siempre hacia delante, entrenador. Serán necesarias 9 líneas por cada movimiento de esta prueba, lanzando dados de combate hasta que la barra de vida haya sido vaciada.